Molécula, ADN, citosina, base nitrogenada
La guanina es una base nitrogenada púrica, una de las cinco bases nitrogenadas que forman parte de los ácidos nucleicos, el ADN y el ARN. En el código genético se representa con la letra G debido a su nombre y debido también a que es una base nitrogenada permite la transferencia de energía para que el organismo tenga suficientes recursos en el metabolismo.
Además, es a su vez una de las cuatro bases químicas del ADN, siendo las otras tres la adenina (A), la citosina (C) y la timina (T). Dentro de la molécula de ADN las bases de guanina localizadas en una hebra forman puentes químicos con la citosina de la hebra opuesta. La guanina es, por tanto, (y para aclararnos mejor) una de las unidades de construcción del ADN. Esta se aparea con la citosina en la doble hélice por lo que se verán pares GC (G de guanina, y C de citosina); una en una hebra y otra en la otra hebra. Cabe destacar que los pares CG crean uniones mucho más fuertes que los pares AT (A de adenina, y T de timina) por lo que tramos largos de CG dan lugar a hebras más firmes que hélices con regiones AT.
Asimismo, es importante saber que la guanina forma los nucleósidos guanosina (Guo) y desoxiguanosina (dGuo) y los nucleótidos guanilato (GMP) y desoxiguanilato (dGMP). La guanina siempre se empareja en el ADN con la citosina mediante tres puentes de hidrógeno. Además, esta es una de las bases más importantes de los ácidos nucleicos y se trata también de una sustancia presente en los excrementos de los ácaros, que es un alérgeno causante de enfermedades como la rinitis y la faringitis. Esta sustancia fue aislada por primera vez en 1844 a partir de los excrementos de las aves marinas, conocidos como guano y que se utilizaban como fuente de fertilizante.
La función principal de la guanina es la intervención en todas las reacciones metabólicas para permitir la transferencia de energía, y además de formar parte de los ácidos nucleicos, en sus formas de nucleósidos monofosfato, difosfato y trifosfatos (GMP, GDP y GTP) participa en procesos tales como el metabolismo energético, la traducción de la señal intracelular, la fisiología de los fotorreceptores y la fusión de vesículas.