Los epitelios son las capas de células unidas entre sí que recubren todas las superficies libres del organismo, y constituyen el revestimiento interno de las cavidades, órganos huecos, conductos del cuerpo, así como forman las mucosas y las glándulas. También se refiere a aquellas células que conforman la superficie exterior del cuerpo.
Por lo tanto, los epitelios germinales en las mujeres son los tejidos que recubren la superficie del ovario formado por un epitelio cúbico simple que en algunas áreas puede ser plano simple, según el estado fisiológico del órgano.
Mientras que en los hombres, los epitelios germinales o germinativos son los tejidos que recubren los tubos seminíferos (pequeños tubos que se hallan dentro de los testículos, encargados de producir espermatozoides y la hormona testosterona masculina).
El epitelio germinativo está compuesto por dos tipos de células, los sustentocitos o células de Sertoli y las células espermatogénicas (de la línea germinal). Este epitelio es estratificado, formado por 4 a 8 capas de células.
Las células de Sertoli descansan sobre la membrana basal del tubo y presentan invaginaciones en su citoplasma donde anidan las espermátidas.
Las células espermatogénicas comprenden varios tipos de células morfológicamente diferentes que representan diferentes estados de maduración y diferenciación de las células masculinas:
- Espermatogonias: localizadas cercanas a la membrana basal, pequeñas, con cromatina nuclear irregular en gránulos gruesos.
- Espermatocitos primarios: ocupan la zona media del epitelio.
- Espermatocitos secundarios: pequeños, cercanos a la luz del túbulo.
- Espermátidas: son esféricas, de pequeño tamaño, núcleo redondo con cromatina condensada, localizadas casi en la luz del tubo.
La función principal de los epitelios germinales es la protección, es decir, proteger las superficies de los ovarios o de los tubos seminíferos contra el daño mecánico y la entrada de microorganismos.
- Producción de gametos: la función principal de los epitelios germinales es producir gametos, es decir, los óvulos en las mujeres y los espermatozoides en los hombres. Estas células germinales se desarrollan a partir de células madre germinales presentes en los epitelios germinales.
- Meiosis: en los epitelios germinales, las células germinales experimentan un proceso llamado meiosis. La meiosis es un tipo especial de división celular en la cual las células germinales se dividen dos veces para producir gametos haploides (con la mitad del número de cromosomas de las células somáticas) que son necesarios para la reproducción sexual.
- Diferenciación celular: durante el desarrollo embrionario y la maduración de los gametos, los epitelios germinales desempeñan un papel crucial en la diferenciación celular. Esto implica la transformación de las células germinales en óvulos y espermatozoides completamente maduros con las estructuras y funciones adecuadas para la fertilización.
- Transporte de gametos: Una vez que los gametos están completamente desarrollados, los epitelios germinales ayudan en su transporte a través del sistema reproductor. En las mujeres, los óvulos liberados desde los ovarios deben atravesar las trompas de Falopio hacia el útero. En los hombres, los espermatozoides deben ser transportados desde los testículos a través de los conductos deferentes y las vías eyaculatorias.
- Interacción con hormonas: los epitelios germinales también responden a las hormonas sexuales, como los estrógenos y la testosterona. Estas hormonas juegan un papel importante en la regulación del desarrollo y la función de los epitelios germinales, así como en la producción y maduración de los gametos.