Diabetes mellitus tipo 1
Términos relacionados
Enfermedad, insulina, glucosa, ganas de orinar, sed
¿Qué es?
La diabetes mellitus tipo 1 es una enfermedad crónica que se caracteriza por haber un alto nivel de azúcar en la sangre. Esta puede desarrollarse en adultos, aunque se caracteriza porque tiene mayor incidencia entre los jóvenes y los niños. En este tipo de diabetes, el propio sistema inmunitario es el que produce una destrucción de las células beta del páncreas, lo que origina una deficiencia total de insulina. La insulina es la hormona que permite que la glucosa de los alimentos pase a las células del organismo. Esta a su vez se necesita para movilizar el azúcar de la sangre, es decir, la glucosa dentro de las células donde se almacena y luego se utiliza para obtener energía.
Con la diabetes tipo 1, lo que sucede es que las células beta producen poca o ninguna insulina. Y sin la insulina suficiente, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo en lugar de entrar en las células. Esta acumulación de glucosa en la sangre se denomina hiperglucemia. El cuerpo es incapaz de usar esta glucosa para obtener energía y esto lleva irremediablemente a los síntomas de diabetes tipo 1.
Síntomas
Los signos y síntomas de la diabetes tipo 1 pueden aparecer de forma relativamente repentina. Los más comunes son:
- Aumento de la sed
- Necesidad de orinar a menudo
- Incontinencia urinaria en niños que anteriormente no mojaban la cama durante la noche
- Hambre extrema
- Adelgazamiento no intencional
- Irritabilidad y otros cambios de humor
- Fatiga y debilidad
- Visión borrosa
Causas
La diabetes tipo 1 es menos común que la diabetes mellitus tipo 2 y, aunque la causa exacta de diabetes tipo 1 se desconoce, lo más probable es que se deba a un trastorno autoinmune, una condición que ocurre cuando el sistema inmunitario ataca por error y destruye el tejido corporal sano. En general, el propio sistema inmunitario del cuerpo, que normalmente combate los virus y bacterias perjudiciales, destruye por error las células del páncreas que producen insulina. Otras causas posibles podrían ser:
- genética. La predisposición genética desempeña un papel importante en la susceptibilidad a la diabetes tipo 1. Si hay antecedentes familiares de la enfermedad, el riesgo puede ser mayor.
- exposición a virus. Algunas investigaciones sugieren que ciertos virus, como los enterovirus, podrían desempeñar un papel en el desarrollo de la diabetes tipo 1. Sin embargo, la relación exacta entre los virus y la enfermedad aún no se comprende completamente.
- factores ambientales pueden desencadenar la respuesta autoinmune en personas genéticamente susceptibles. Estos factores pueden incluir infecciones virales, exposición a ciertos alimentos o toxinas, entre otros.
Aunque se han identificado varios factores genéticos y ambientales asociados con la diabetes tipo 1, sigue habiendo aspectos desconocidos sobre por qué y cómo se inicia la respuesta autoinmune en el páncreas.
Factores de riesgo
- Antecedentes familiares. El riesgo aumenta si el padre, la madre o algún hermano tienen diabetes tipo 1.
- Factores ambientales. Circunstancias como la exposición a una enfermedad viral.
- La presencia de células del sistema inmunitario que causan daños (autoanticuerpos). Algunas veces, los familiares de personas con diabetes tipo 1 se someten a una prueba de detección de autoanticuerpos de la diabetes. Si tienes estos autoanticuerpos, tienes mayor riesgo de padecer diabetes tipo 1, pero no todas las personas que tienen estos autoanticuerpos padecen diabetes.
- Ubicación geográfica. Ciertos países, como Finlandia y Suecia, presentan índices más altos de diabetes tipo 1.
Complicaciones
Con el paso del tiempo, las complicaciones de la diabetes tipo 1 pueden afectar a los órganos principales del cuerpo, como el corazón, los vasos sanguíneos, los nervios, los ojos y los riñones. Mantener un nivel de azúcar en sangre normal puede reducir el riesgo de sufrir diversas complicaciones.
- Enfermedades del corazón y circulatorias. La diabetes aumenta en gran medida el riesgo de tener varios problemas cardiovasculares.
- Lesión a los nervios (neuropatía). El exceso de azúcar puede dañar las paredes de los vasos pequeños (capilares) que alimentan los nervios, especialmente en las piernas. Esto puede causar hormigueo, entumecimiento, ardor o dolor. Además, el nivel de azúcar en sangre mal controlado puede causar que, con el tiempo, pierdas la sensibilidad en las extremidades afectadas.
- Daño renal (nefropatía). Los riñones contienen millones de grupos de vasos sanguíneos pequeños que filtran los desechos de la sangre. La diabetes puede dañar este delicado sistema de filtración. El daño grave puede causar una insuficiencia renal o una enfermedad renal en etapa terminal irreversible, que requiere diálisis o bien un trasplante de riñón.
- Daño en los ojos. La diabetes puede dañar los vasos sanguíneos de la retina (retinopatía diabética) lo que podría causar ceguera. La diabetes también aumenta el riesgo de otros trastornos graves de la vista, como cataratas y glaucoma.
- Daños en los pies. Las lesiones a los nervios de los pies o el flujo sanguíneo deficiente en los pies aumentan el riesgo de diversas complicaciones. Si no se las trata, las heridas y ampollas pueden causar infecciones graves que podrían llegar a requerir la amputación del dedo, el pie o la pierna.
- Trastornos de la piel y la boca. La diabetes puede hacerte más propenso a infecciones de la piel y la boca, como infecciones fúngicas y bacterianas.
- Complicaciones en el embarazo. Los altos niveles de azúcar en la sangre pueden ser peligrosos tanto para la madre como para el bebé. En la madre la diabetes aumenta el riesgo de cetoacidosis diabética, problemas de ojo diabético (retinopatía), presión arterial alta causada por el embarazo y preeclampsia.
Otras complicaciones en las que coinciden ambos tipos de diabetes, y que se puedan dar a largo plazo si se mantienen niveles altos de glucosa en sangre de manera continuada, son:
- Problemas cardíacos
- Nefropatías
- Neuropatías
- Pie diabético
- Problemas relacionados con la visión
- Trastornos óseos y de las articulaciones
- Complicaciones cutáneas
- Problemas en el aparato digestivo
- Disfunción sexual
- Problemas en los dientes y las encías
Prevención
No existe una forma conocida de prevenir la diabetes tipo 1. No obstante, son muchos los investigadores que trabajan en la prevención de la enfermedad o en la destrucción de las células de islotes en personas recientemente diagnosticadas.
Diagnóstico
Las pruebas de diagnóstico comprenden:
- Prueba de hemoglobina glicosilada (A1C). Este análisis de sangre indica el nivel promedio de azúcar en la sangre de los últimos dos o tres meses. Mide el porcentaje de azúcar en sangre unido a la proteína de los glóbulos rojos que transporta oxígeno (hemoglobina). Cuanto más alto sea el nivel de azúcar en la sangre, mayor será la cantidad de hemoglobina con glucosa. Un nivel de A1C del 6,5 por ciento o más en dos análisis separados indica la presencia de diabetes. Si no es posible hacerte una prueba de A1C o si tienes ciertas afecciones que provocan que los resultados de la prueba no sean precisos el médico puede utilizar estas pruebas:
- Examen aleatorio de azúcar en la sangre. Se tomará una muestra de sangre en un horario al azar, y se pueden confirmar los resultados con la repetición del análisis. Los niveles de azúcar en la sangre se expresan en miligramos por decilitro (mg/dL) o en milimoles por litro (mmol/L). Un nivel aleatorio de glucosa en la sangre de 200 mg/dL (11,1 mmol/L) o más indica probabilidad de diabetes, especialmente, cuando está relacionado con cualquiera de los signos y síntomas de la diabetes, como orinar frecuentemente y tener mucha sed.
- Examen de azúcar en la sangre en ayunas. Se tomará una muestra de sangre tras una noche de ayuno. Un nivel de azúcar en sangre en ayunas menor que 100 mg/dL (5,6 mmol/L) es normal. Un nivel de azúcar en sangre en ayunas entre 100 y 125 mg/dL (5,6 a 6,9 mmol/L) se considera prediabetes. Si el resultado es 126 mg/dL (7 mmol/L) o más en distintos análisis es diabetes.
Tratamiento
Las personas con diabetes tipo 1 tienen que prestar un poco más de atención a lo que comen y lo que hacen que las personas que no padecen esta enfermedad. Estas necesitan:
- medirse la concentración de azúcar en sangre según indicaciones
- inyectarse insulina o usar una bomba de insulina según indicaciones
- seguir una dieta equilibrada y saludable con cantidades de hidratos de carbono precisos
- hacer ejercicio físico con regularidad
- hacerse revisiones regulares con sus médicos y otros miembros del equipo que lleva su diabetes para poder mantenerse sanos y recibir tratamiento de cualquier problema relacionado con la diabetes.
Fuentes
- American Diabetes Association. 2. Classification and diagnosis of diabetes: standards of medical care in diabetes - 2020. Diabetes Care. 2020;43(Suppl 1):S14-S31. PMID: 31862745 pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31862745/
- Atkinson MA, Mcgill DE, Dassau E, Laffel L. Type 1 diabetes mellitus. In: Melmed S, Auchus, RJ, Goldfine AB, Koenig RJ, Rosen CJ , eds. Williams Textbook of Endocrinology. 14th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 36.