20 reglas para vivir 100 años
Cuando pensamos en nuestra vida y en el tiempo que queremos vivir, casi todos nos ponemos de meta llegar a los 100 años… ¿Es posible para todos? ¿Si seguimos una serie de consejos y reglas, podremos vivir mínimo 100 años?
Índice
¿Se puede llegar a vivir 100 años?
Respecto a la pregunta de si todos podemos llegar a vivir 100 años, hay que tener en cuenta que, en lo que respecta a la esperanza de vida y la longevidad, influyen muchos factores, algunos de los cuales sí dependen de nosotros, pero otros no.
Por ejemplo, en nuestra genética se encuentran determinados genes que pueden hacer que desarrollemos enfermedades crónicas que reducirán nuestra esperanza de vida, pero muchos de estos genes no tienen por qué activarse si llevamos un estilo de vida adecuado. Otros, lamentablemente, sí.
Los avances en medicina y los mayores conocimientos científicos sobre la longevidad y el envejecimiento han hecho que cada vez más personas en todo el mundo estén alcanzando esta edad y superando incluso este número.
Si bien no hay una fórmula mágica para vivir hasta los 100 años, llevar un estilo de vida saludable puede ayudar a aumentar las posibilidades de llegar a esta edad. También evitar accidentes que puedan acabar repentinamente con nuestra vida, como los automovilísticos.
En última instancia, es imposible predecir cuánto tiempo vivirá una persona, pero hay muchas cosas que puede hacer para aumentar sus posibilidades de vivir una vida larga y saludable. Descubre 20 de ellas.
20 reglas para vivir 100 años (o más)
1- Reúne información sobre ti y tu salud. Lo primero que debes hacer es saber de dónde partes, es decir, cómo está tu cuerpo, tu mente y tu salud general. Anota en un cuaderno cómo te sientes, si experimentas algún síntoma o molestia, cómo duermes… Si quieres ser más preciso, estaría bien llevar un registro de tu peso, tu presión arterial, tu ritmo cardiaco… Puedes usar un smartwatch, un podómetro o alguna app que te ayude a llevar este registro.
2- Sé regular. Los horarios y los hábitos no son solo buenos para los bebés y los niños pequeños, sino para todos nosotros ya que nos permiten respetar nuestro ritmo circadiano y mantener la homeostasis (el equilibrio interno), evitando ciertas enfermedades y problemas como los trastornos del sueño o el estrés. Procura levantarte, comer, cenar y acostarte todos los días a la misma hora.
3- Lleva una dieta fresca y saludable. Ahora que cada día salen a la luz ideas nuevas y diferentes sobre qué dieta es mejor o qué alimentos nos hacen vivir más, seguro que tienes un jaleo monumental sobre los alimentos que debes ingerir para aumentar tu longevidad. Quédate con una idea fundamental: alimentos naturales. Cuanto más naturales y menos procesados, mejor ya que aportarán más nutrientes esenciales como vitaminas, minerales, fibra dietética, etc. Frutas, verduras, pescados, legumbres, cereales integrales… compra todo fresco y cocina tú mismo en casa, cuesta menos de los que piensas.
4- Mantén un peso sano. El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades graves como el síndrome metabólico, la diabetes tipo 2, las enfermedades cardiovasculares o el cáncer. Por eso, debes controlar tu peso y mantenerte siempre en un índice de masa corporal normal, es decir, entre 18,5 y 24,99. Por encima o por debajo de ese índice puedes tener problemas de salud.
5- Controla el estrés. El estrés crónico aumenta el riesgo de muchas enfermedades tanto físicas como mentales, por lo que debes procurar mantenerlo a raya mediante ejercicio físico, yoga, meditación, técnicas de respiración o incluso terapia.
6- Muévete. El sedentarismo es absolutamente contrario a la longevidad. El ejercicio físico regular nos ayuda a evitar enfermedades como el Alzheimer, el cáncer, las cardiovasculares… Incluso moverse más, subir escaleras, usar menos el coche, pasear por la oficina o cualquier pequeño snack de movimiento nos puede ayudar a vivir más.
7- No te aísles. La soledad aumenta el riesgo de enfermedades como la depresión o el Alzheimer. Incluso de enfermedades físicas ya que el contacto social nos hace cuidarnos más y llevar hábitos de vida saludables. Por eso, es importante que no te aísles conforme cumplas años ni te vuelvas un ermitaño. Mantén tus relaciones sociales y, si es posible, una pareja ya que el amor nos ayuda a vivir más.
8- Planifica tu vida. Tener metas, objetivos y sueños nos ayuda a vivir más, y eso es importante sobre todo al jubilarnos ya que la falta de metas tras dejar de trabajar puede llevarnos a la soledad, el sedentarismo, el aburrimiento y las faltas de ganas de vivir. Mantén metas y sueños, todavía te queda mucho por hacer.
9- Sal de tu zona de confort. Arriésgate, prueba cosas nuevas, haz algo diferente… te sorprenderá como estimula tu mente y tu cuerpo.
10- Ríete y sé feliz. La risa, el optimismo y la felicidad nos ayudan a vivir más al sentirnos mejor y liberar endorfinas y serotonina, neurotransmisores que proporcionan felicidad y bienestar.
11- Dedica tiempo a tus aficiones. La vida no es solo responsabilidades y trabajar, debemos sacar todos los días un ratito para nuestras aficiones y para hacer aquello que más te gusta o te divierte, como leer, quedar con las amigas, pintar, ir a museos, etc.
12- No te saltes tu examen físico anual. Para vivir más tiempo, debes hacer todo lo posible para prevenir enfermedades o, al menos, detectarla en una etapa temprana. Por eso es esencial hacerse chequeos anuales y aquellas pruebas de detección temprana recomendadas para cada edad, como mamografías, colonoscopias, exámenes de próstata, etc.
13- Cultiva un jardín. Plantar y cuidar un jardín nos ayuda a vivir más al involucrar ejercicio y proporcionarnos beneficiosas saludables para tu mente. Y si no tienes esa opción por dónde vives, al menos mantén contacto regular con la naturaleza, los árboles, etc. Los estudios han encontrado que pasar más tiempo en la naturaleza puede reducir la depresión, hacernos más activos y reducir nuestra exposición a la contaminación.
14- Descubre tus antecedentes familiares. Conocer el historial de salud de tu familia puede ayudarte a tener una ventaja sobre muchas enfermedades que pueden acortar tu vida; comprueba si entre tus familiares más cercanos hay antecedentes de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, diabetes o cáncer. Incluso puedes hacerte un test genético para descubrir tus posibilidades de desarrollar ciertas enfermedades y, así, centrarte en prevenirlas.
15- Duerme lo suficiente. Los estudios muestran que es necesario dormir entre 7 y 8 horas para que nuestro cuerpo se recupere de los excesos del día y pueda evitar ciertos problemas. Por eso, debes procurar todos los días este número de horas, ni más, ni menos.
16- Evita sustancias peligrosas como el tabaco, el alcohol o ciertos contaminantes que pueden poner en peligro tu salud al dañar tu ADN.
17- Mantente hidratado. ¿Sabías que la deshidratación puede hacernos sentir cansados, mareados y confundidos? Nuestros cuerpos y cerebros necesitan la suficiente cantidad de agua para funcionar adecuadamente. La deshidratación puede aumentar el riesgo de caídas, nos hace más propensos al estreñimiento y puede afectar nuestra salud renal. El problema es que la sensación de tener sed se reduce a medida que envejecemos, así que tenemos que estar atentos de beber agua regularmente.
18- Mantén tu higiene bucal. La boca es entrada de muchos microorganismos que pueden causarnos no solo enfermedades bucales como la caries o la gingivitis, sino también infecciones en otros organismos. Por eso, debes cepillarte los dientes todos los días después de cada comida, usar hilo dental y acudir con regularidad a tu dentista.
19- Respira profundamente. La capacidad pulmonar comienza a disminuir alrededor de los 35 años a medida que las vías respiratorias pierden elasticidad, la postura cambia y el diafragma pierde fuerza, lo que dificulta la absorción del oxígeno que el cuerpo necesita para mantenerse activo y saludable. Disminuye estos cambios ejercitando tus pulmones durante 5 o 10 minutos al día: respira profundamente, concentrándote en bajar el diafragma y respirando lentamente.
20- Recurre a suplementos antienvejecimiento. Muchos suplementos antienvejecimiento actúan directamente sobre las principales causas de envejecimiento, como el acortamiento de los telómeros, el estrés oxidativo, la senescencia celular… úsalos para aumentar tu longevidad.
Ideas clave
- En nuestra genética se encuentran determinados genes que pueden hacer que desarrollemos enfermedades crónicas que reducirán nuestra esperanza de vida, pero muchos de estos genes no tienen por qué activarse si llevamos un estilo de vida adecuado. Otros, lamentablemente, sí.
- Si bien no hay una fórmula mágica para vivir hasta los 100 años, llevar un estilo de vida saludable puede ayudar a aumentar las posibilidades de llegar a esta edad. También evitar accidentes que puedan acabar repentinamente con nuestra vida, como los automovilísticos.
- Si quieres vivir mucho debes seguir estos 20 consejos: reúne información sobre ti y tu salud, sé regular en tus horarios, lleva una dieta saludable, mantén un peso normal, controla el estrés, haz ejercicio, no te aísles, planifica tu vida, sal de tu zona de confort, sé feliz, dedica tiempo a tus aficiones, hazte chequeos médicos, cultiva un jardín, descubre tus antecedentes familiares, duerme lo suficiente, evita sustancias peligrosas, mantente hidratado, mantén tu higiene bucal, respira profundamente y recurre a suplementos antienvejecimiento.
Enfermedades relacionadas
Fuente:
- J. Graham Ruby, Kevin M. Wright, Kristin A. Rand, Amir Kermany, Keith Noto, Don Curtis, Neal Varner, Daniel Garrigan, Dmitri Slinkov, Ilya Dorfman, Julie M. Granka, Jake Byrnes, Natalie Myres and Catherine Ball. Estimates of the Heritability of Human Longevity Are Substantially Inflated due to Assortative Mating. GENETICS November 1, 2018 vol. 210 no. 3 1109-1124; https://doi.org/10.1534/genetics.118.301613