
Beneficios del CBD para la salud
El CBD, o cannabidiol, es el segundo ingrediente activo más frecuente en la planta de cannabis sativa (marihuana). El CBD no contiene tetrahidrocannabinol (THC), el ingrediente psicoactivo presente en la marihuana que produce el efecto psicoactivo. El CBD ha ganado mucha popularidad en los últimos años y se utiliza en numerosos productos, desde tópicos hasta bebidas. Descubre si sus beneficios son reales o no.
Índice
- ¿Qué es el CBD y cómo funciona en el organismo?
- Beneficios del CBD para la salud
- Consideraciones de seguridad del CBD
¿Qué es el CBD y cómo funciona en el organismo?
El CBD (cannabidiol) es un compuesto natural no psicoactivo que se encuentra en la planta del cannabis. A diferencia del THC (tetrahidrocannabinol), no produce efectos intoxicantes o de "colocón".
Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, «En humanos, el CBD no presenta efectos indicativos de potencial de abuso o dependencia… Hasta la fecha, no hay evidencia de problemas de salud pública asociados con el uso de CBD puro». Un estudio reciente publicado en la revista Neuropsychopharmacology concluyó que «es poco probable que el consumo agudo de CBD por sí solo afecte significativamente el funcionamiento diario o el rendimiento laboral».
El CBD ha ganado popularidad por sus posibles beneficios terapéuticos en ansiedad, dolor, insomnio, inflamación y epilepsia.
Ejerce diversos efectos farmacológicos beneficiosos. Por ejemplo, es ansiolítico, antiinflamatorio, antiemético y antipsicótico. Además, se han demostrado propiedades neuroprotectoras. Por consiguiente, podría utilizarse en dosis altas para el tratamiento de diversas afecciones, desde trastornos psiquiátricos como la esquizofrenia y la demencia hasta la diabetes y las náuseas.
¿Cómo funciona el CBD en el organismo?
El CBD actúa principalmente modulando el sistema endocannabinoide (SEC), una red de receptores que regula funciones clave como el sueño, el estado de ánimo, la inflamación, la inmunidad y el dolor.
1. Interacción con receptores endocannabinoides (CB1 y CB2). No se une directamente, pero modula su actividad, ayudando a restaurar el equilibrio corporal (homeostasis).
2. Modulación de receptores no cannabinoides:
o Receptores de serotonina (5-HT1A): Efectos ansiolíticos y antidepresivos.
o Receptores TRPV1: Involucrados en la percepción del dolor e inflamación.
o Receptores GABA y adenosina: Efectos calmantes y anticonvulsivos.
3. Propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Reduce la producción de citoquinas proinflamatorias y combate el estrés oxidativo.
Beneficios del CBD para la salud
1- Ayudar a reducir el dolor crónico
El dolor crónico presenta importantes obstáculos personales, psicológicos y socioeconómicos, que afectan a más del 30% de los adultos en todo el mundo y contribuyen sustancialmente a la discapacidad. Los fármacos basados en cannabinoides, en particular el cannabidiol (CBD), son prometedores para el manejo del dolor, gracias a su origen natural, versatilidad y menor riesgo de adicción.
Un estudio demostró que las personas consumieron menos opioides para el dolor cuando recibieron tratamiento con extracto de cáñamo rico en CBD. Otro estudio demostró que el aceite de CBD tópico puede ayudar a aliviar el dolor y la picazón causados por la neuropatía periférica.
2- Tratar la epilepsia
El cannabidiol (CBD) se ha investigado como un enfoque farmacológico para el tratamiento de numerosos trastornos neurológicos y psiquiátricos, siendo el más exitoso su uso como fármaco anticonvulsivo (TEA). De hecho, el CBD se ha utilizado en la práctica clínica para el tratamiento de ciertos síndromes epilépticos.
La evidencia más sólida a favor del CBD se encuentra en el tratamiento de síndromes epilépticos infantiles, como el síndrome de Dravet y el síndrome de Lennox-Gastaut, que generalmente no responden a los anticonvulsivos. En numerosos estudios, el CBD logró reducir el número de convulsiones o incluso detenerlas por completo, razón por la cual Epidiolex con CBD fue aprobado por la FDA. Este estudio de 2023 de la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York explica su eficacia: el CBD bloquea las señales transportadas por una molécula llamada lisofosfatidilinositol (LPI), presente en las neuronas cerebrales, que puede ser secuestrada por enfermedades y provocar convulsiones. El estudio también aclaró de forma más amplia cómo se equilibran los circuitos cerebrales, por lo que podría tener un impacto más amplio en el tratamiento del autismo y la esquizofrenia.
3- Reducir la ansiedad y el estrés
Una metarrevisión de 2019 (6 pequeños ensayos controlados aleatorizados, 1 serie de casos, 1 informe de caso) concluyó que el CBD tiene un papel prometedor como terapia alternativa para el manejo de los trastornos de ansiedad. Sin embargo, se necesitan más estudios con enfoques estandarizados de dosificación y mediciones de resultados clínicos para determinar la estrategia de dosificación adecuada y su lugar en la terapia.
La investigación sobre la eficacia del CBD para la ansiedad es mayoritariamente positiva. Una revisión de investigaciones de 2015 encontró evidencia sólida de que el CBD puede ayudar a tratar diversos trastornos de ansiedad, como el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de pánico y el trastorno de estrés postraumático.
En un ensayo clínico de 2022, 14 personas con ansiedad recibieron altas dosis de CBD sublingual durante cuatro semanas, tres veces al día. Reportaron menos ansiedad y mejor estado de ánimo, sueño y calidad de vida, y no mostraron efectos secundarios graves.
Un estudio de 2021 descubrió que el CBD ayudó a mejorar la ansiedad en personas con trastornos moderados a graves, pero aumentó la ansiedad en personas con ansiedad leve.
4- Mejorar el insomnio
El cannabis medicinal (THC + CBD) mejoró el sueño en adultos con insomnio. Un pequeño estudio aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo realizado por investigadores australianos (2022) probó aceite de cannabis medicinal con THC y CBD en personas con insomnio y descubrió que mejoraba la calidad y la cantidad del sueño. Los niveles de melatonina, la hormona del sueño, aumentaron un 30 % y aproximadamente el 60 % de los participantes ya no presentaban insomnio al cabo de dos semanas.
En otro estudio, el CBD en dosis bajas fue más eficaz que la melatonina para mejorar la calidad del sueño. Un ensayo controlado aleatorizado, doble ciego, realizado en 2023 por la UCLA y el Centro del Sueño de la Clínica Scripps evaluó la eficacia de diversas formulaciones de CBD frente a la melatonina en la calidad del sueño de 1.800 adultos. El resultado: las dosis bajas de CBD (15 mg) fueron seguras y mejoraron la calidad del sueño en pacientes con antecedentes de trastornos del sueño, aunque estos efectos no superaron los de 5 mg de melatonina.
5- Ayudar en trastornos neurodegenerativos
La enfermedad de Alzheimer (EA) es el trastorno neuropsiquiátrico más prevalente entre la población de edad avanzada, afectando a un mínimo de 50 millones de personas en todo el mundo. Los tratamientos farmacológicos actuales se basan en la prescripción de inhibidores de la colinesterasa y memantina. Sin embargo, hallazgos recientes, basados en datos de baja calidad de la práctica clínica, han impulsado a médicos, pacientes y familiares a considerar el uso de cannabinoides, especialmente cannabidiol (CBD), para aliviar los síntomas de la EA.
El CBD presenta un potencial terapéutico prometedor en diversos contextos clínicos. Estudios preclínicos e in vitro indican que el CBD podría mitigar el deterioro cognitivo y la neurodegeneración inducida por beta-amiloide al modular el estrés oxidativo y la neuroinflamación. Además, el CBD demuestra efectos significativos en la promoción de la neuroplasticidad, especialmente en regiones cerebrales como el hipocampo. Sin embargo, la evidencia clínica disponible presenta resultados contradictorios y hasta la fecha no se han publicado ensayos aleatorizados controlados con placebo. En conclusión, si bien los estudios preclínicos e in vitro ofrecen información alentadora sobre los posibles beneficios del CBD en los modelos de EA, es imperativo realizar ensayos clínicos nuevos y bien diseñados para determinar la relevancia clínica del uso del CBD en el tratamiento de los síntomas de la EA, especialmente en comparación con los tratamientos convencionales.
6- Cáncer
Una revisión se centró exclusivamente en los efectos antitumorales de los cannabinoides en los gliomas. De los 2.260 estudios identificados hasta diciembre de 2012, 35 cumplieron los criterios de inclusión. Con la excepción de un pequeño ensayo clínico, todos estos estudios fueron preclínicos. Los 16 estudios in vivo encontraron un efecto antitumoral de los cannabinoides.
Por el momento, no existe evidencia suficiente para afirmar la eficacia de los cannabinoides como tratamiento para el glioma. Sin embargo, la literatura preclínica sugiere que es necesario realizar investigación clínica con cannabinoides.
7- Tratar las náuseas de la quimioterapia
Las revisiones sistemáticas de Whiting et al. (2015) y Smith et al. (2015) concluyen que los cannabinoides como nabilona y dronabinol son más eficaces que el placebo y similares a los antieméticos convencionales para tratar náuseas y vómitos inducidos por la quimioterapia. Aunque provocan más efectos adversos (mareo, sedación, euforia), varios estudios muestran que los pacientes prefieren los cannabinoides frente a algunos medicamentos tradicionales como la proclorperazina.
En pacientes pediátricos, los resultados son limitados, pero algunos ensayos mostraron mejor control de náuseas con THC y nabilona comparado con fármacos como domperidona y proclorperazina. Sin embargo, la evidencia aún es débil o de baja calidad, y se necesita más investigación especialmente en terapias modernas y alternativas no psicoactivas como el cannabidiol (CBD).
8- Síndrome del Intestino Irritable
El síndrome del intestino irritable (SII) es un trastorno digestivo común que afecta al 11 % de la población mundial, caracterizado por dolor abdominal y alteraciones en el tránsito intestinal. Existen cuatro tipos de SII: con diarrea (IBS-D), con estreñimiento, mixto y no clasificado.
Los receptores cannabinoides tipo 1 (CB1), presentes en el colon, participan en la regulación del tránsito gastrointestinal e inflamación, por lo que se ha planteado que los cannabinoides podrían tener efectos terapéuticos en el SII.
Sin embargo, no se han identificado revisiones sistemáticas de buena calidad que respalden la eficacia del cannabis medicinal para el tratamiento del SII. Solo se encontró un ensayo clínico pequeño (Wong et al., 2012) con 36 pacientes con SII con diarrea, en el que el dronabinol no mostró efectos significativos en el tránsito gastrointestinal comparado con placebo.
La evidencia actual es insuficiente para afirmar que los cannabinoides sean efectivos en el tratamiento del SII. Se necesitan más estudios con mayor duración, tamaño de muestra y resultados reportados por los pacientes.
Consideraciones de seguridad del CBD
Generalmente bien tolerado.
Posibles efectos secundarios: somnolencia, sequedad bucal, cambios en el apetito, interacciones con medicamentos (p. ej., anticoagulantes).
Se recomienda iniciar con dosis bajas y consultar con un profesional de la salud.
El principal riesgo del consumo de CBD es que la mayoría de los productos de CBD no están regulados. Muchos productos que afirman contener CBD también contienen otros cannabinoides, como el THC. Hay que tener cuidado al usar estos productos y consultar siempre con un médico.

Ideas clave
- El CBD (cannabidiol) es un compuesto no psicoactivo presente en el cannabis, diferente del THC, y no produce efectos intoxicantes.
- La OMS afirma que no tiene riesgo de abuso o dependencia.
- Se ha estudiado por sus posibles efectos beneficiosos en ansiedad, dolor, insomnio, inflamación y epilepsia.
- El CBD actúa principalmente sobre el sistema endocannabinoide, modulando receptores CB1 y CB2, y también afecta otros receptores como los de serotonina (ansiedad), TRPV1 (dolor) y GABA (calmante).
- Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Principales beneficios potenciales del CBD: Alivio del dolor crónico: Estudios muestran que el CBD puede reducir el dolor y disminuir el uso de opioides.
- Epilepsia: Es uno de los usos mejor documentados. El medicamento Epidiolex, aprobado por la FDA, utiliza CBD para tratar síndromes epilépticos como Dravet y Lennox-Gastaut.
- Ansiedad y estrés: Algunos ensayos clínicos muestran que el CBD puede reducir la ansiedad, aunque los resultados varían según la gravedad del trastorno.
- Trastornos del sueño: Mezclas de CBD y THC han mejorado la calidad del sueño en personas con insomnio, pero se necesita más investigación.
- Enfermedades neurodegenerativas (como Alzheimer): Estudios preclínicos muestran que podría reducir el deterioro cognitivo, aunque la evidencia clínica aún es insuficiente.
- Cáncer: Estudios preclínicos indican que los cannabinoides tienen efectos antitumorales, pero faltan ensayos clínicos sólidos.
- Náuseas por quimioterapia: Cannabinoides como dronabinol y nabilona son eficaces contra náuseas, pero la evidencia sobre el CBD es limitada.
- Síndrome del Intestino Irritable (SII): La evidencia clínica es muy escasa y contradictoria; se requieren más estudios.
- Generalmente bien tolerado, el CBD puede causar somnolencia, sequedad bucal y cambios en el apetito.
- Puede interactuar con otros medicamentos.
- Es importante utilizar productos de calidad y consultar a un médico, ya que muchos productos en el mercado no están bien regulados y podrían contener THC1.
Enfermedades relacionadas
Fuente:
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