Beneficios de la vitamina k para la mente y el cuerpo

Beneficios de la vitamina k para la mente y el cuerpo

La vitamina K desempeña un papel fundamental en diversas funciones del organismo, respaldadas por estudios científicos en áreas como la coagulación sanguínea, la salud ósea, cardiovascular y cognitiva, e incluso en la investigación oncológica.

Índice

¿Qué es la vitamina K?

La vitamina K es una vitamina liposoluble esencial para la coagulación de la sangre y el metabolismo óseo. Su función principal es actuar como cofactor en la carboxilación de ciertas proteínas dependientes de la vitamina K, como la protrombina, que permite la coagulación sanguínea adecuada.

En la circulación, la vitamina K se transporta principalmente en lipoproteínas. En comparación con otras vitaminas liposolubles, la vitamina K circula en la sangre en cantidades muy pequeñas. Se metaboliza y excreta rápidamente. Según mediciones de filoquinona, el organismo retiene solo entre el 30 y el 40 % de la dosis fisiológica oral, mientras que aproximadamente el 20 % se excreta en la orina y entre el 40 y el 50 % en las heces a través de la bilis. Este rápido metabolismo explica los niveles sanguíneos y las reservas tisulares relativamente bajos de vitamina K en comparación con los de otras vitaminas liposolubles.

Tipos de vitamina K:

1. Vitamina K1 (filoquinona): se encuentra principalmente en vegetales de hoja verde como espinacas, col rizada, brócoli y lechuga. Es la forma predominante en la dieta.

2. Vitamina K2 (menaquinona): se produce por bacterias intestinales y también se encuentra en alimentos fermentados como el natto (soja fermentada), algunos quesos y carnes.

Funciones clave:

• Coagulación de la sangre: activa factores de coagulación (II, VII, IX y X).

Salud ósea: participa en la activación de osteocalcina, una proteína que ayuda a fijar el calcio en los huesos.

Salud cardiovascular: puede ayudar a prevenir la calcificación arterial al activar proteínas inhibidoras de la calcificación.

Deficiencia:

Es poco común, pero puede ocurrir en personas con:

• Enfermedades hepáticas.

• Síndromes de malabsorción.

• Uso prolongado de antibióticos o anticoagulantes como warfarina.

Beneficios de la vitamina K para la mente

Una revisión reciente recopiló estudios que demuestran su participación en el metabolismo del sistema nervioso central (SNC), lo que sugiere la posibilidad de que una deficiencia de vitamina K esté relacionada con la aparición de deterioro cognitivo.

Estas funciones recientemente descubiertas revelaron que esta vitamina participa en la activación enzimática de la proteína específica de detención del crecimiento 6 (Gas-6) y la proteína S. La primera tiene actividad antiapoptótica, mitogénica y mielinizante, mientras que la segunda ofrece protección neuronal durante la lesión isquémica/hipóxica, tanto in vivo como in vitro.

Además, se sabe que la vitamina K es un inductor de la síntesis de esfingolípidos, componentes fundamentales de las membranas celulares neuronales. Estos lípidos polares son parte esencial de la membrana celular del SNC y están vinculados a la proliferación y diferenciación neuronal.

Diversos estudios también investigan la correlación entre el deterioro cognitivo y el uso de antagonistas de la vitamina K (AVK, es decir, warfarina, acenocumarol y fluindión) como anticoagulantes orales.

El mecanismo subyacente a la enfermedad de Alzheimer es el depósito del péptido β-amiloide (Aβ) y los ovillos neurofibrilares de la proteína tau, que se une a los microtúbulos. En particular, los péptidos Aβ son responsables de la muerte neuronal masiva que caracteriza a la enfermedad.

Algunos estudios concluyeron que la vitamina K parece prevenir la apoptosis inducida por Aβ mediante la activación de Gas-6, mostrando un efecto prosupervivencia en las células cerebrales.

En cuanto a la demencia vascular, las principales causas son diversas patologías vasculares que provocan isquemia cerebral. Estudios publicados en los últimos años han atribuido a la proteína S (activada por la vitamina K) un papel en la mejora del flujo sanguíneo cerebral postisquémico, lo que podría conducir a un pronóstico cognitivo más favorable.

Por lo tanto, parece que, efectivamente, la vitamina K podría tener un papel en la salud cerebral, ayudando a prevenir el deterioro cognitivo y la pérdida de memoria en adultos mayores.

Asimismo, aunque los estudios son limitados, existe evidencia que sugiere que el estado nutricional de vitamina K puede afectar el comportamiento y la cognición. Factores dietéticos y ciertos tratamientos farmacológicos, como los derivados de la warfarina, podrían modular la acción de la vitamina K en el sistema nervioso.

Otros beneficios de la vitamina K para la salud

1. Coagulación sanguínea

La vitamina K es esencial para la síntesis de proteínas necesarias en el proceso de coagulación de la sangre. Sin niveles adecuados de esta vitamina, el cuerpo no puede producir los factores de coagulación II, VII, IX y X, lo que puede llevar a hemorragias.

La vitamina K ayuda a producir cuatro de las 13 proteínas necesarias para la coagulación sanguínea, lo que impide que las heridas sangren continuamente y puedan cicatrizar. A las personas a quienes se les recetan anticoagulantes (también llamados diluyentes sanguíneos) para prevenir la formación de coágulos en el corazón, los pulmones o las piernas, a menudo se les informa sobre la vitamina K. Debido a su acción coagulante, la vitamina K tiene el potencial de contrarrestar los efectos de los medicamentos anticoagulantes. Un método común para estimar los niveles sanguíneos de vitamina K es la medición del tiempo de protrombina (TP), o el tiempo que tarda la sangre en coagularse. A las personas que toman anticoagulantes, como la warfarina (Coumadin), se les puede recomendar consumir una cantidad constante de vitamina K a través de alimentos y suplementos.

2. Salud ósea

La vitamina K contribuye a la salud ósea al participar en la carboxilación de la osteocalcina, una proteína que ayuda a fijar el calcio en los huesos. Algunos estudios sugieren que una mayor ingesta de vitamina K está asociada con una mayor densidad ósea y un menor riesgo de fracturas, aunque los resultados no son concluyentes.

Además, los niveles bajos de vitamina K en sangre se han relacionado con una baja densidad ósea. Un informe del Nurses’ Health Study sugiere que las mujeres que consumen al menos 110 mcg de vitamina K al día tienen un 30 % menos de probabilidades de fracturarse la cadera que las mujeres que consumen menos. Los datos del Framingham Heart Study también mostraron una asociación entre una alta ingesta de vitamina K y un menor riesgo de fractura de cadera en hombres y mujeres, y un aumento de la densidad mineral ósea en las mujeres.

3. Salud cardiovascular

La vitamina K2 (menaquinona) ayuda a prevenir la calcificación arterial al activar proteínas que inhiben la deposición de calcio en las arterias, lo que podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, parece reducir la inflamación. Las personas que consumen más vitamina K1 tienen menos probabilidades de ser hospitalizadas por enfermedades cardíacas debido a la obstrucción de las arterias. La vitamina K2 también ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, aunque este hallazgo es menos seguro debido a que la vitamina K2 se presenta en muchas formas que se comportan de forma diferente en el organismo.

La vitamina K participa en la producción de proteínas de la matriz Gla (MGP), que ayudan a prevenir la calcificación o el endurecimiento de las arterias cardíacas, un factor que contribuye a las enfermedades cardíacas. Dado que la investigación en este campo es muy limitada, se necesitan estudios adicionales antes de proponer una cantidad específica de vitamina K que supere la recomendación estándar para esta afección.

4. Potencial en la investigación oncológica

Estudios preliminares han mostrado que la menadiona, una forma sintética de vitamina K, puede ralentizar el crecimiento de células de cáncer de próstata en modelos animales, abriendo nuevas vías para la investigación en tratamientos oncológicos.

¿Se deben tener precauciones al tomar suplementos de vitamina K?

Aunque la vitamina K es segura en las cantidades recomendadas, su suplementación debe ser monitoreada en personas que toman anticoagulantes, ya que puede interferir con la eficacia de estos medicamentos.

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Ideas clave

  • La vitamina K es una vitamina liposoluble esencial para: la coagulación sanguínea (activa proteínas como la protrombina). El metabolismo óseo. La salud del sistema cardiovascular y posiblemente la salud cerebral.
  • Circula en la sangre en cantidades pequeñas, se metaboliza rápidamente y se elimina en orina y heces.
  • Funciones principales: Coagulación: activa factores II, VII, IX y X. Huesos: activa osteocalcina, que fija el calcio. Corazón: previene la calcificación arterial. Cerebro: participa en la síntesis de esfingolípidos y activa proteínas que protegen neuronas. 
  • Beneficios para la mente: Posible protección contra deterioro cognitivo y Alzheimer, al activar proteínas como Gas-6 y proteína S, que protegen y reparan neuronas.
  • Relación observada entre deficiencia de vitamina K y riesgo de demencia (vascular o neurodegenerativa).
  • Algunos estudios sugieren efectos positivos sobre el comportamiento y la memoria, aunque se necesitan más investigaciones.
  • Otros beneficios: imprescindible para evitar sangrados excesivos. Influye en el manejo de medicamentos anticoagulantes como la warfarina.
  • Asociada con mayor densidad ósea y menor riesgo de fracturas.
  • La vitamina K2 reduce la calcificación arterial. Activa la proteína MGP, que previene el endurecimiento de las arterias.
  • La menadiona (vitamina K sintética) ha mostrado capacidad para ralentizar el crecimiento de células tumorales en cáncer de próstata (estudios preliminares).
  • La vitamina K es segura en dosis normales, pero los suplementos deben monitorearse en personas con tratamiento anticoagulante, ya que puede interferir con la medicación.

Enfermedades relacionadas

Fuente:

  • Alisi L, Cao R, De Angelis C, Cafolla A, Caramia F, Cartocci G, Librando A, Fiorelli M. The Relationships Between Vitamin K and Cognition: A Review of Current Evidence. Front Neurol. 2019 Mar 19;10:239. doi: 10.3389/fneur.2019.00239.
     
  • Feskanich D, Weber P, Willett WC, Rockett H, Booth SL, Colditz GA. Vitamin K intake and hip fractures in women: a prospective study. Am J Clin Nutr. 1999;69:79. Am J Clin Nutr
 
  • Booth SL, Broe KE, Gagnon DR, et al. Vitamin K intake and bone mineral density in women and men. Am J Clin Nutr. 2003;77:5126. Am J Clin Nutr

Redacción: Irene García

Supervisión editorial: Carlos Gutiérrez

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