Las personas que viven más tiempo son positivas y controlan sus emociones

Índice

• ¿Influye la personalidad en la longevidad?
• Positivismo y control de emociones

¿Influye la personalidad en la longevidad?

Entre los muchos factores asociados con la longevidad, la personalidad se ha relacionado con los resultados de salud y la longevidad.

La personalidad se refiere a un conjunto estable de rasgos y patrones de comportamiento cognitivos, motivacionales, sociales y emocionales, que está influenciado por la historia familiar, la predisposición genética, el entorno y los factores socioculturales.

La relación entre personalidad y longevidad se ha explorado más a fondo examinando las vías a través de las cuales la personalidad puede influir en los resultados de salud. Alcanzar los 100 años parece tener una influencia genética muy fuerte y se ha descubierto que la contribución genética es mayor en la población de mayor edad. La personalidad puede representar mecanismos genéticos y neurofisiológicos subyacentes que pueden afectar directamente los resultados de salud. Además, ciertos rasgos de personalidad compartidos por los centenarios, como el bajo neuroticismo y la alta extraversión y escrupulosidad, también pueden tener fuertes componentes hereditarios/genéticos. Por ejemplo, se ha informado que los hijos de centenarios muestran un nivel más bajo de neuroticismo y un nivel más alto de extraversión que la población general.

En segundo lugar, los rasgos de personalidad (p. ej., neuroticismo, una tendencia duradera a experimentar emociones negativas) pueden afectar los resultados de salud a través de procesos mediadores como la regulación de las emociones. Específicamente, se ha informado que la depresión, que puede verse como resultado de una desregulación de las emociones, es un predictor importante de resultados de salud negativos y mortalidad y se ha descubierto que el neuroticismo es un factor de riesgo importante para la depresión y mortalidad temprana.

Además, algunos investigadores sostienen que el afecto negativo prolongado (por ejemplo, depresión y ansiedad) está relacionado con la susceptibilidad a las enfermedades a través de cambios fisiológicos en el SNS (sistema nervioso simpático), el eje HPA (hipotálamo-pituitario-suprarrenal), las hormonas del estrés, la presión arterial, el metabolismo, y función inmune. Por lo tanto, los mediadores vinculados a los rasgos de personalidad, como la desregulación crónica de las emociones, pueden tener un impacto adverso en los resultados de salud a través de su efecto sobre la función fisiológica/biológica.

En tercer lugar, la personalidad puede influir en los resultados de salud al afectar la elección de comportamientos relacionados con la salud de un individuo. La escrupulosidad se ha relacionado con la longevidad, y las investigaciones sugieren que las personas con un alto nivel de escrupulosidad tienden a practicar conductas saludables (p. ej., realizar ejercicio físico) y evitar conductas riesgosas para la salud (p. ej., beber y fumar en exceso).

En resumen, las características de personalidad favorables se han asociado con resultados positivos de salud en la vejez y la longevidad a través de diversos mecanismos.

Positivismo y control de emociones

La mayoría de los centenarios tienen rasgos de personalidad similares que pueden haber ayudado a aumentar su esperanza de vida. Una investigación analizó las características de casi 250 centenarios y todos tenían dos rasgos en común: eran positivos y tenían un alto grado de conciencia emocional.

El Inventario de Personalidad NEO Revisado (NEO-PI-R) y el Inventario de Cinco Factores NEO (NEO-FFI) son medidas de personalidad desarrolladas para estudios longitudinales de la personalidad y el envejecimiento y se basan en el Modelo de Cinco Factores (FFM) que representa rasgos que incluyen neuroticismo/estabilidad emocional, extraversión, apertura a la experiencia, amabilidad y escrupulosidad. Algunos rasgos de la FFM se han asociado con resultados de salud favorables y longevidad en adultos mayores.

Además, varios estudios han sugerido que los centenarios también comparten rasgos de personalidad particulares. El Estudio Centenario de Georgia informó que los centenarios tienen un nivel más bajo de neuroticismo y niveles más altos de extraversión, competencia (una faceta de la escrupulosidad) y confianza (una faceta de la amabilidad) que la población estadounidense de edades mixtas. Además, el estudio sueco sobre centenarios demostró que los centenarios parecían más tranquilos, relajados, capaces y eficientes que la población sueca de edades mixtas.

Un estudio buscó detectar fenotipos de personalidad de base genética en una muestra genéticamente homogénea de centenarios mediante el desarrollo y examen de las propiedades psicométricas de una medida breve de la personalidad de los centenarios, la Escala de perfil de perspectiva de personalidad (POPS). Los resultados generaron dos características/dominios de personalidad, actitud positiva hacia la vida (PATL: optimismo, tranquilidad, risa e introversión/extrovertida) y expresión emocional (EE: expresar emociones abiertamente y no reprimirlas).

Además, los centenarios de ambos grupos tenían un neuroticismo más bajo y una mayor escrupulosidad que la población adulta de EE. UU.

Por lo tanto, si quieres vivir más tienes que intentar ser más positivo. Dar prioridad a la paz y la felicidad. Ser optimista y buscar soluciones en lugar de problemas. Eso te ayudará a afrontar mejor los reveses de la vida y cuidar tu salud física y mental.

Asimismo, los centenarios consideran la risa como una parte importante de su vida, lo que también favorece su longevidad.

Y tener un alto grado de conciencia emocional. Ser consciente emocionalmente también es algo común entre los centenarios. Esto significa que no reprimen sus emociones y se esfuerzan por comunicar cómo se sienten a quienes los rodean.

Expresar tus emociones de forma saludable puede beneficiar las relaciones. Y la aptitud social, el acto de dedicarse a las conexiones que valoras y resolver cualquier problema para convertirte en un mejor amigo y socio, se ha relacionado con una mayor felicidad y longevidad.