Evitar la exposición al sol puede aumentar la mortalidad

Evitar la exposición al sol puede aumentar la mortalidad

Esta afirmación puede sorprenderte de primeras, ya que es de sobra conocido que la exposición solar puede causar ciertos problemas de salud, como el cáncer de piel. No obstante, también es muy conocido que el sol es beneficioso para la salud siempre que se tome en su justa medida y con seguridad. Por lo tanto, si quieres vivir más, no evites totalmente el sol.

Índice

Pros y contras de la exposición al sol

La radiación ultravioleta del sol aumenta el riesgo de desarrollar melanoma maligno de la piel, un tipo de cáncer que es cada vez más común en nuestra sociedad.

El riesgo de melanoma maligno varía ampliamente entre personas de diferente color de piel, dependiendo del tipo de melanina en su piel. Así, es más común entre los europeos del norte con piel pálida y es raro entre los africanos con piel muy oscura. Las personas con cabello rojo o con tendencia a desarrollar pecas también tienen un mayor riesgo de desarrollar melanoma maligno. Por eso, se aconseja evitar la radiación ultravioleta en sociedades en las que una gran proporción de la población presenta piel clara o cabello rojo.

No obstante, tampoco es conveniente evitar totalmente la exposición a los rayos solares, ya que estos también aportan una serie de beneficios para nuestra salud. Principalmente, la luz solar sigue siendo la principal fuente de vitamina D, ya que los alimentos con vitamina D aportan mucha menor cantidad que la que se obtiene mediante la transformación de la prohormona producida por los rayos solares. Adicionalmente, la vitamina D es esencial para la formación normal de los huesos y de los dientes así como para la absorción del calcio a nivel intestinal, teniéndo además un papel muy importante en la musculatura, el sistema nervioso y el sistema inmunitario.

El déficit de vitamina D prolongado puede causar problemas de salud como raquitismo, osteoporosis, hipocalcemia y osteomalacia. Asimismo, la deficiencia de vitamina D también está vinculada con la disminución de la función cognitiva y la aparición de enfermedades crónicas como el cáncer de mama, colon, próstata y ovarios, fatiga crónica, psoriasis, artritis reumatoide, tuberculosis, enfermedades cardiacas, enfermedades inmunológicas o depresión.

Por lo tanto, los niveles bajos de vitamina D están asociados con un aumento en la mortalidad por todas las causas, por lo que no debemos evitar totalmente la exposición al sol, por muy blancos y pelirrojos que seamos.

La exposición al sol y la mortalidad

Un estudio de 2014 confirmó que la baja exposición al sol es un factor de aumento del riesgo de mortalidad por todas las causas. Esta investigación siguió a 29.518 mujeres suecas (de piel clara, por lo tanto, con más riesgo de melanoma maligno) en un seguimiento prospectivo de 20 años de la cohorte Melanoma in Southern Sweden (MISS). Las mujeres fueron reclutadas entre 1990 y 1992 y tenían entre 25 y 64 años al comienzo del estudio.

Los investigadores obtuvieron información detallada al inicio del estudio sobre sus hábitos de exposición al sol y, al acabar el tiempo de estudio, comprobaron que hubo 2.545 muertes entre todas ellas. Se encontró que la mortalidad por todas las causas se relacionó inversamente con los hábitos de exposición al sol.

Se realizaron ajustes por comorbilidad, edad, hábito tabáquico, nivel educativo, estado civil e ingresos disponibles e incluso así la tasa de mortalidad entre las que evitaron la exposición al sol fue aproximadamente el doble en comparación con el grupo de exposición al sol más alta. En comparación con el grupo de mayor exposición al sol, la tasa de mortalidad se duplicó entre los que evitaban la exposición solar y aumentó en un 40% en aquellos con exposición moderada.

Por lo tanto la RAP (Riesgo Atribuible Poblacional o el porcentaje total de muertes o casos de una enfermedad que se hubiesen evitado en una población si se elimina la exposición al factor de riesgo en estudio) de mortalidad para quienes evitan la exposición al sol fue del 3%.

¿Por qué evitar el sol aumenta la mortalidad?

Aunque el estudio no se centró en la causa de la muerte, se presume que la mayoría murió debido al cáncer, enfermedades cardíacas, enfermedades cerebrovasculares o enfermedades metabólicas.

Respecto a este tipo de enfermedades mortales, los investigadores ofrecen una serie de explicaciones entre la falta de exposición al sol y al aumento de mortalidad. Por ejemplo, existe una variación estacional conocida tanto en la enfermedad cardíaca como en la enfermedad cerebrovascular, con un mayor riesgo durante el invierno/primavera en comparación con el verano. Esto parece indicar que el sol nos “protege” en cierta forma de estas enfermedades, probablemente debido al aumento de vitamina D en verano y otoño. De hecho, existen datos que avalan que existe un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte temprana entre las personas con niveles bajos de vitamina D.

Con respecto a la diabetes, por ejemplo, el sistema de melatonina podría estar involucrado en el menor riesgo de diabetes tipo 2 entre aquellos con los hábitos de exposición al sol más altos. Otra posible explicación es que la exposición a los rayos UVB induce endorfinas cutáneas. Se ha informado que el uso de camas de bronceado induce un mejoramiento del estado de ánimo, sentimientos de relajación y socialización, debido a la exposición a los rayos UVB.

Otra posibilidad es que la radiación solar UVA provoque un aumento de la bioactividad de la piel, lo que reduce la presión arterial y la morbilidad cardiovascular.

Cáncer de piel y sol

Los tumores de piel, la principal preocupación de la exposición excesiva al sol, consisten en tres tipos (con una gravedad creciente): carcinoma de células basales, carcinoma de células escamosas y melanoma maligno.

La exposición al sol aumenta el riesgo de melanoma maligno principalmente a través de quemaduras solares episódicas o el uso infrecuente de cremas solares en personas con piel clara sin protección. La enfermedad es mortal en aproximadamente el 20% de los pacientes. El carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas a menudo afectan a personas mayores y se asocian principalmente con la exposición acumulativa a la luz ultravioleta. La incidencia de ambos tipos de tumores está aumentando. El carcinoma de células basales generalmente no es fatal, pero podría ser localmente agresivo, mientras que la cirugía o la radioterapia proporcionan una cura para la mayoría de los pacientes con carcinoma de células escamosas.

Pero, como hemos dicho, estos cánceres están relacionados con el tipo de piel, pero también con el tipo de exposición solar (excesiva, sin protección, prolongada…). Por lo tanto, tomar el sol de manera moderada no aumenta el riesgo de cáncer de piel, mientras que sí nos protege de la mortalidad por todas las causas.

A modo indicativo, se puede tomar el sol siempre y cuando se evite que la piel se queme. Así, tomar todos los días el sol a primeras horas de la mañana, últimas de la tarde y restringir los minutos en las horas centrales es una buena práctica que aporta numerosos beneficios a nuestra salud. Y, por supuesto, siempre usando un factor de protección adecuado según nuestro fototipo de piel

Consejos para una exposición solar beneficiosa

1- Nunca permitas que la piel llegue a quemarse. 

2- La exposición al sol deber ser progresiva, siendo mejor empezar con unos pocos minutos al día y paulatinamente incrementar el tiempo. Existen aplicaciones que indican el máximo de tiempo posible al que se puede estar expuesto al sol sin riesgo de sufrir alguna quemadura. 

3- Una vez alcanzados los minutos máximos de exposición, protégete del sol siempre, incluso en invierno o en los días nublados. Usa una crema de protección solar con factor alto, aunque siempre teniendo en cuenta tu tipo de piel.

4- Utiliza gorro y gafas de sol con filtro solar.

4- Evita la exposición al sol prolongada, sobre todo en las horas centrales del día en verano (de 12 a 16 horas).

5- Hidrátate bien.

6- Cuida tu alimentación, desde dentro también nos protegemos de los daños de los rayos UVA y UVB a nuestra piel. Consume muchas frutas y verduras.

7- Evita tomar el sol más de 2 horas ya que más de este tiempo puede causar cambios en la estructura del cerebro. 

 

 

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Ideas clave

  • La radiación UV aumenta el riesgo de melanoma, especialmente en personas con piel clara y cabello rojo.
  • Beneficios de la exposición solar: fuente principal de vitamina D, esencial para huesos, dientes y sistema inmunitario.
  • El déficit de vitamina D está asociado con enfermedades como osteoporosis, cáncer, problemas cardiovasculares y depresión.
  • Un estudio en Suecia confirma que la baja exposición al sol se asocia con mayor mortalidad por todas las causas.
  • El efecto protector del sol puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2.
  • Cáncer de piel y tipos: Incluye carcinoma de células basales, carcinoma de células escamosas y melanoma maligno; el melanoma es el más mortal.
  • Exposición segura al sol: evitar quemaduras, exponerse en horas tempranas o tarde y usar protector solar.
  • Consejos para una exposición saludable: no dejar que la piel se queme. Incrementar el tiempo al sol gradualmente. Usar protección solar, gorro y gafas. Evitar sol en horas centrales (12-16 h) y limitar el tiempo a máximo 2 horas. Mantener hidratación y alimentación balanceada (frutas y verduras). 

Enfermedades relacionadas

Fuente:

  • P. G. Lindqvist, E. Epstein, M. Landin44;Olsson, C. Ingvar, K. Nielsen, M. Stenbeck, H. Olsson. Avoidance of sun exposure is a risk factor for all cause mortality: results from the Melanoma in Southern Sweden cohort. First published: 04 April 2014. Journal Of Internal Medicine.https://doi.org/10.1111/joim.12251
 

Redacción: Irene García

Supervisión editorial: Tomás Duraj

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