¿Cuáles son los beneficios del sol y cómo aprovecharlos?
La relación con el sol ha cambiado en los últimos años y hemos pasado de querer tomar el sol a todas horas a huir de él por miedo a sus efectos perjudiciales. Sin embargo, el sol sigue siendo muy beneficioso y necesario para nuestra vida, solo hay que saber cómo obtener sus ventajas sin que nos afecten sus perjuicios.
Índice
- ¿Cuáles son los beneficios del sol para la salud?
- ¿Qué daños puede causar la exposición al sol excesiva?
- ¿Cómo aprovechar los beneficios del sol sin que nos haga daño?
¿Cuáles son los beneficios del sol para la salud?
Entre los muchos beneficios del sol para nuestra salud y nuestra longevidad encontramos:
- Proporciona vitamina D: la exposición al sol es la principal fuente de vitamina D para nuestro cuerpo. La vitamina D es esencial para la absorción de calcio y el fortalecimiento de los huesos. También desempeña un papel importante en la función inmunológica, la salud cardiovascular y la prevención de enfermedades crónicas. Los alimentos, a no ser que estén fortificados, contienen poca cantidad de vitamina D, pero solo 15 minutos de sol al día puede ayudarnos a sintetizar la cantidad necesaria de esta vitamina esencial.
- Mejora del estado de ánimo: la luz solar estimula la producción de serotonina, un neurotransmisor relacionado con el estado de ánimo y la felicidad. La exposición al sol puede ayudar a mejorar el ánimo, reducir el estrés y aliviar los síntomas de la depresión.
- Regula el ritmo circadiano: el sol es crucial para regular nuestro ritmo circadiano, que es nuestro ciclo natural de sueño-vigilia. La exposición a la luz solar durante el día ayuda a mantener un ritmo circadiano saludable, lo que nos permite tener un sueño de calidad por la noche. Así, permite que segreguemos más cortisol por el día y más melatonina por la noche, ayudándonos a despertar y dormir respectivamente.
- Mejora la salud cardiovascular: la vitamina D producida por la exposición al sol puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, la luz solar puede ayudar a regular la presión arterial y mejorar la circulación sanguínea. Cuando aumentan los niveles de vitamina D, disminuye la hormona paratiroidea y la presión sanguínea en consecuencia.
- Refuerza el sistema inmunológico: el sol estimula la producción de células del sistema inmunológico, como los linfocitos, que ayudan a combatir infecciones y enfermedades. La vitamina D también desempeña un papel importante en la función inmunológica. De hecho, puede incluso ayudarnos a prevenir algunos tipos de cáncer ya que esta vitamina protege frente a algunos tumores como los de mama, colon, ovarios, vejiga…
- Mejora de la salud de la piel: la exposición al sol en cantidades adecuadas puede tener beneficios para la piel. La luz solar puede ayudar a tratar ciertas afecciones de la piel, como el acné, la psoriasis y la dermatitis atópica. Además, la luz solar puede mejorar la apariencia de la piel al estimular la producción de colágeno.
- Favorece la vida sexual: tomar el sol con moderación eleva los niveles de testosterona, una hormona responsable del apetito sexual. Por eso en verano tenemos más ganas de sexo…
¿Qué daños puede causar la exposición al sol excesiva?
Está claro que el sol aporta muchos beneficios para nuestra salud, pero también es cierto que, si no sabemos cómo exponernos a él de manera adecuada, puede aumentar el riesgo de muchas enfermedades y problemas. Entre los principales encontramos:
- quemaduras solares que pueden causar enrojecimiento, dolor, descamación de la piel e incluso ampollas.
- envejecimiento prematuro de la piel. La radiación ultravioleta (UV) daña las fibras de colágeno y elastina en la piel, lo que puede provocar arrugas, manchas solares, flacidez y una textura de piel áspera.
- cáncer de piel. La radiación UV puede dañar el ADN de las células de la piel, lo que puede llevar a mutaciones y el crecimiento descontrolado de células cancerosas. Los tipos más comunes de cáncer de piel son el carcinoma de células basales, el carcinoma de células escamosas y el melanoma.
- supresión del sistema inmunológico de la piel. La radiación UV puede suprimir la función del sistema inmunológico de la piel, lo que reduce la capacidad de defensa contra infecciones y enfermedades de la piel
- problemas oculares. La exposición a la radiación UV sin protección también puede dañar los ojos. Puede aumentar el riesgo de cataratas, daño a la córnea, pterigión (crecimiento anormal de tejido en el ojo) y degeneración macular relacionada con la edad.
- cambios estructurales en el cerebro. Tomar el sol más de 2 horas seguidas puede afectar a las estructuras del cerebro y, por lo tanto, a las funciones cognitvas.
¿Cómo aprovechar los beneficios del sol sin que nos haga daño?
Ahora que queda claro lo bueno que puede ser el sol, pero también que los rayos UV pueden ser muy perjudiciales, debemos saber cómo obtener todos sus beneficios sin que nos cause ningún daño. Para ello, debes seguir estos consejos:
1. Limita la exposición en las horas de mayor intensidad, es decir, entre las 11 y las 16 horas. Durante este tiempo, la radiación ultravioleta es más intensa y aumenta el riesgo de quemaduras solares y daño a la piel. El sol emite dos tercios de los rayos UV en este período horario preciso, por lo que debes evitar estar mucho tiempo al sol en estas horas. Evita también las camas de bronceado.
2. Usa protector solar. Aplícate un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30 en todas las áreas expuestas de la piel, incluso en días nublados o en invierno. El factor de protección depende de tu fototipo de piel (más o menos clara), pregunta a un profesional de dermatología si tienes dudas de cuál debes usar. La crema debe proteger frente a rayos UVA y UVB. Asegúrate de aplicarlo correctamente y renovarlo cada 2 horas o después de nadar o sudar.
3. Usa ropa protectora. Usa ropa de manga larga, pantalones largos y un sombrero de ala ancha para proteger tu piel de los rayos solares. Opta por tejidos de colores claros y con protección UV incorporada.
4. Protege también tus ojos de la radiación ultravioleta usando gafas de sol con protección UV. Esto ayuda a prevenir el daño ocular y reduce el riesgo de cataratas y degeneración macular.
5. Mantente bien hidratado. Cuando estás el sol o hace mucho calor, sobre todo si estás realizando alguna actividad física, debes beber mucha agua para reponer los líquidos perdidos por la transpiración y el calor.
6. Aumenta gradualmente la exposición al sol si has estado poco expuesto al sol durante un tiempo, especialmente al comienzo de la temporada de verano. Se debe aumentar gradualmente la exposición para permitir que la piel se adapte y evitar quemaduras.
7. Sigue una dieta sana rica en alimentos que te protegen del sol. Las frutas y verduras de verano contienen muchos antioxidantes y betacarotenos, vitaminas C y E y polifenoles que estimulan la síntesis natural de colágeno, protegiendo las capas superficiales de la epidermis y evitando los daños de los rayos UV a tu piel.
8. Ve a revisiones con el dermatólogo. Se aconseja hacerse revisiones periódicas de la piel, sobre todo si tienes muchos lunares ya que algunos de ellos pueden convertirse en tumores. Revísalos también en casa y observa si alguno cambia de color, tamaño, tiene varios colores o formas irregulares…
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- Entre los beneficios del sol encontramos proporcionar vitamina D, mejorar el estado de ánimo, regular el ritmo circadiano, mejorar la salud cardiovascular, reforzar el sistema inmunológico, mejorar la salud de la piel, favorecer la vida sexual.
- Sin embargo, una exposición excesiva también puede causar daños como quemaduras, cáncer de piel, envejecimiento prematuro de la piel, supresión del sistema inmunológico de la piel, problemas oculares.
- Para aprovechar los beneficios del sol sin que este nos causa daños debemos adoptar una serie de medidas de precaución como limitar la exposición al sol en las horas centrales del día, usar protector solar, usar ropa protectora, protegerse los ojos del sol, mantenerse bien hidratado, seguir una dieta sana, aumentar gradualmente la exposición al sol, acudir a revisiones dermatológicas.
Fuente:
- P. G. Lindqvist, E. Epstein, M. Landin‐Olsson, C. Ingvar, K. Nielsen, M. Stenbeck, H. Olsson. Avoidance of sun exposure is a risk factor for all‐cause mortality: results from the Melanoma in Southern Sweden cohort. First published: 04 April 2014. Journal Of Internal Medicine. https://doi.org/10.1111/joim.12251
- Li, H., Cui, F., Wang, T. et al. The impact of sunlight exposure on brain structural markers in the UK Biobank. Sci Rep 14, 10313 (2024). https://doi.org/10.1038/s41598-024-59633-z